Si buscamos en Internet la definición de PRIORATO, pues aparecen varias acepciones, casi todas referente a la religión. Pero solo le haremos caso a la que hace referencia a una zona de la región catalana, y al vino que se consigue en dicha zona. Para más datos pinchar AQUÍ.
Pero podemos afinar más con esta palabra y poner en el buscado Google, PRIORATO BOIRO, nos sale muchas páginas haciendo referencia a un CAFE BAR en la población gallega de Boiro.
Antes de seguir aclarar que Boiro es el pueblo coruñés donde he pasado las vacaciones estivales en compañía de Mari, Ana y J. Carlos. Los datos de Boiro, pinchando AQUÍ.
Y esta historia la cuento por como hemos sidos tratados en dicho bar, para nosotros como nuestra segunda casa en Boiro.
Cuando llegamos el primer día a Bairo, y nos instalamos en el piso que habíamos alquilado, nos fijamos en el bar que había en la esquina contraria a la nuestra y pensamos que era otro bar como de los muchos que hay en esos pueblos. Pasamos de largo la primera tarde para ver más locales del pueblo. Después de la experiencia, desagradable, en el primero que entramos (fuimos vilmente clavados) decidimos refugiarnos en el Priorato apara ahogar nuestras penas entre tercios de Estrella Galicia.
Lo primero que me sorprendió fue el saludo del joven camarero "Buenas tardes amigos pasar, que deseáis???" eso con el más profundo acento gallego. Fuimos servido rápidamente y acto seguido una camarera, también joven, nos trae una ración de orejas, riquísimas. En la segunda ronda de bebidas nos volvió a traer orejas más orejas, es decir, cenamos allí.
Al día siguiente volvimos a ir a tomar cervezas y a comer lo que nos pusieran, sinceramente no me acuerdo pero decir que nunca sobraba nada de los que nos ponían, señal de que estaba muy bueno.
Así fueron pasando los días y nosotros que NO somos de beber, ni de charlar fuimos conociendo a Celeste y Alberto, los propietarios del negocio. Sumándole esto el tiempo allí invertido viendo las 17 medallas conseguida por las españolas en las olimpiadas de Londres y descansando de las duras jornadas de visita a la comunidad gallega. Un día incluso nos dejaron bajar una empanada de Monforte, que teníamos para que la comiéramos allí.
De ellos, Alberto&Celeste, siempre recibimos sonrisas y los mejores consejos de que ver, comer y beber por las rutas turísticas de su región. Así como a que fiestas ir. Tan bien se han potado con nosotros que estábamos invitados a una cena de la peña del Priorato (personas que se reunen para practicar todo tipo de deportes y actividades lúdicas/festivas/culinarias) pero esta cena era el martes 14, con lo que ya no estábamos allí.
Siendo consciente que no podíamos ir a dicha cena, para más de 25 personas, el domingo, día antes de nuestra partida, decidieron cerrar un poco antes el bar y cenar con nosotros. No solo cenaron con nosotros sino que nos invitaron a cenar y nos regalaron unas botellas de vino gallego.
Alberto&Celeste, Celeste&Alberto, desde este humilde blog daros las gracias y que sepáis que sin vosotros Galicia no hubiera sido lo mismo. Y que cuando queráis venir por Cádiz tendréis unos guias deseando enseñaros este rincón y sus gentes.
MUCHAS GRACIAS.
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