En el tiempo donde todos se hace más cómodo, donde cualquiera tiene en sus manos tecnología más avanzada que la que mandó a los primeros humanos al espacio, donde con darle a un botón se hacen las cosas, donde queremos que la tecnología supla a los conocimientos y la razón humana, en este tiempo y en el breve espacio de dos (2) horas, dos buques de pasajeros sufren sendos accidentes, uno de ellos con 8 muertos y cerca de un centenar de desaparecidos.
Ayer, por la tarde, dos buques (uno de pasajeros y otro de carga) colisonan a escasos kilómetros de la bocana del puerto de Ceuta y en apenas dos horas un mega-crucero embarranca junto al espigón de entrada en una isla de Italia. En Italia es donde han fallecido, de momento, 8 personas y no aparecen cerca de 100.
Imagen de la colisión de los dos barcos en Ceuta. Foto tomada de www.ceutaldia.com
Imagen del accidente del barco en Italia. Foto tomada de www.elpais.com
Ahora es el tiempo de que se abran sus respectivos estudios del porque de estos accidentes.
Pero estos barcos están preparados, o por lo menos deben, con sistemas que detectan movimientos alrededor de ellos (radares), con equipos capaces de avisas si el barco se desvía de su rumbo (GPS), con balizas que iluminan los radares de otros barcos, con avanzadas emisoras en constante contacto con las torres de control de las Capitanías Marítimas, con sistemas de evacuación que vacían el barco, de personas, en menos de 5min y un sinfín más de equipos para intentar evitar estos accidentes.
Lo cierto es que estas accidentes siguen ocurriendo.
¿Será que dejamos en manos de las máquinas el trabajo que deberíamos hacer nosotros? o ¿erá que tenemos un exceso de confianza en dichos sistemas? Espero que los motivos de estos accidentes no sean estos.
Mi más sentido pésame a la familia de las personas fallecidas.
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